La alimentación de los perros de raza pequeña
¿Sabías que, en proporción, la energía que requiere un perro pequeño es casi el doble de la que necesita uno grande? Imaginemos lo que puede significar eso a nivel alimenticio: si debe consumir tanto, pero a la vez tiene un cuerpo tan pequeño, no bastará con darle más comida. Habrá que pensar bien para no provocarle serios problemas por impedir la correcta digestión de la misma.
Los animales, cuanto más pequeños son, menos tardan en llegar a su tamaño adulto definitivo. Del mismo modo, sus físicos tienen unas características muy concretas (boca pequeña, intestino pequeño). De ahí la importancia de que si decidimos que su alimentación sea solo alimento balanceado éste sea específico para razas pequeñas: no sólo por contar con un diámetro menor de la croqueta, ni por estar cuidadosamente estudiado para facilitar la correcta digestión.
Debemos ser estrictos con su rutina alimenticia, puesto que cualquier alteración, por pequeña que parezca, tendrá efectos mucho más grandes en un chihuahua que en un mastín. Es importante evitar cambios bruscos de dieta, como también evitar que nuestra comida se “caiga” de la mesa. Cuanto más estrictos seamos con la rutina alimenticia de nuestra mascota, más lo agradecerá su salud.
Menos cantidad, más raciones
En realidad es matemática pura: un perro de dimensiones pequeñas requerirá menos cantidad de comida para saciarse. Ahora bien, queda el problema de compensar sus elevadas exigencias energéticas. ¿Solución? Más raciones con menor cantidad. Una medida de dos a cuatro raciones al día es lo ideal para que las razas pequeñas puedan digerir correctamente su comida, de todos modos es importante que el médico veterinario a cargo de la salud de tu mascota te explique la cantidad por día que debes darle al igual que decirte que alimento es mejor en el caso de cada mascota.