Lo que debes saber para combatir las pulgas y garrapatas

Por: Equipo Edupet Santiago.

La época más activa de pulgas y garrapatas coincide con la primavera y el verano. La subida de la temperatura reactiva su metabolismo aletargado con el frío. Sin embargo, los inviernos son cada vez más suaves, por lo que es probable que pulgas y garrapatas también puedan parasitar al perro durante la época de frío, aunque en menor cantidad.

¿Qué son las pulgas y garrapatas?

Tanto las pulgas como las garrapatas son parásitos externos. Las pulgas son insectos de 1 a 3 milímetros de longitud de color oscuro, marrón rojizo. No tienen alas, pero tienen una tremenda capacidad de salto que les permite moverse con facilidad. Tienen ciclo vital de larva-pupa-adulto. Viven pocos meses, y ponen aproximadamente 30 huevos diarios, por lo que una sola pulga inicial puede significar una infestación grave en menos de un mes. Si las condiciones ambientales no son propicias (mucho frío) las pulgas en su estado de pupa pueden mantenerse vivas en estado inactivo dentro de su capullo durante muchos meses, y prefieren esconderse en zonas como las grietas del suelo, alfombras, camas, muebles etc.

Las garrapatas son ácaros (de la misma clase que las arañas), de tamaño variable entre 3 y 10 milímetros las hembras, y los machos son siempre más pequeños. No pueden volar ni saltar, pero nuestra garrapata más común en Chile, Rhipicephalus sanguineus, tiende a buscar lugares altos para ocultarse, y luego dejarse caer sobre su víctima. Tienen ciclo vital de larva-ninfa-adulto. Y al igual que la pulga, tienen un ciclo de vida que les permite infestar con gran rapidez a su hospedero. Necesitan alimentarse de sangre durante todas las etapas de su vida, por lo que ya desde el mismo momento de su nacimiento buscarán un animal en el que hospedarse. Durante las épocas frías o ambientes inadecuados pueden mantenerse en un modo de hibernación llamado “diapausa” durante aproximadamente un año.

¿Cómo saber si tu mascota tiene pulgas y/o garrapatas?

Si tu mascota tiene pulgas, lo más probable es que se rasque y mordisquee continuamente, y puedas encontrar áreas enrojecidas y piel irritada. Muy importante es buscar las heces de pulga (que parecen puntitos negros) principalmente en el área entre el final del lomo y la cola. También es posible observar las pulgas directamente, cuando la carga parasitaria es muy grande.

Las garrapatas adultas prefieren las zonas de piel fina, ya que así les resulta más fácil alimentarse. Para buscarlas, inspecciona: cuello, orejas por dentro, por detrás y entre los pliegues, entre los dedos, abdomen e ingles, y zona perianal. El parásito, una vez se instala, ocasiona una herida a través de la cual se alimentará. Esta hemorragia es fácilmente reconocible.

¿Cómo afectan las pulgas y garrapatas a la salud de las mascotas?

Dada su condición de artrópodos hematófagos (se alimentan de sangre) estos parásitos ocupan un importante lugar como vectores o transmisores de enfermedades que son debilitantes para su huésped o que constituyen una amenaza para la vida de los animales y de los humanos (zoonosis).

Debido a su tipo de alimentación, y siempre que el grado de infestación sea severo, pueden provocar en el animal parasitado debilidad, adelgazamiento progresivo, anemia (por la gran pérdida de sangre) e incluso la muerte de la mascota por anemia intensa o por alguna otra enfermedad a la que queda susceptible debido a su estado de debilidad extrema.

El daño mecánico de la picadura del parásito, sumado a los efectos de las sustancias irritantes de su saliva, provocan lesiones inflamatorias de la piel que se manifiestan con prurito (picor), rascado e inquietud.

En pulgas es principalmente importante la dermatitis alérgica a la picadura de la pulga (DAPP), una reacción de hipersensibilidad provocada por el alérgeno que transmite la pulga a través de la saliva. Esta reacción a la picadura de la pulga está considerada como una de las afecciones cutáneas alérgicas más graves y más frecuentes. Una única picadura basta para producir un inmenso picor y subsecuente irritación y daño en la piel.

Asimismo, las pulgas pueden contagiar la tenia Dipylidium caninum, también conocida como la tenia del perro, un parásito muy molesto y peligroso que en casos de carga excesiva, puede desnutrirlos, debilitarlos e incluso obstruir su intestino.

Además, las pulgas pueden transmitir diversas bacterias, entre ellas las responsables de la enfermedad del arañazo del gato.

Por otra parte, es importante saber que las garrapatas ofrecen el riesgo potencial de contagio de distintas enfermedades infecciosas muy graves. En Chile las principales son la Ehrlichiosis y Babesiosis, enfermedades que le pueden costar la vida a nuestros perros.

Consejos para combatir pulgas y garrapatas

• Mantener a tu mascota desparasitada periódicamente, tanto interna como externamente, con sus controles veterinarios y vacunas al día.
• Revisar el pelaje de tu mascota de manera habitual, sobre todo en primavera y en verano, cuando garrapatas y pulgas están más activas. Así como mantener una higiene adecuada de tu mascota, con cepillados habituales del pelaje y con baños ocasionales si tu mascota lo permite.
• No usar nunca productos antiparasitarios que no sean adecuados para la especie que sea tu mascota. Consulta siempre con tu veterinario.
• Mantén tu casa siempre limpia de parásitos, sobre todo te recomendamos aseo profundo y desinfección tanto por dentro como por fuera. Lavar bien ropa y mantas, y aspirar todos los rincones y ranuras, camas, colchones y muebles.
• Si tu casa ya está infestada, te recomendamos solicitar ayuda profesional para deshacerte de estos parásitos, pues suele ser una tarea muy difícil y frustrante.