Preparación de ambiente adecuado para prevenir miedo a fuegos artificiales
Por: Equipo Edupet Santiago
Durante las fiestas de fin de año aparecen estímulos medio ambientales que pueden alterar el bienestar físico y psicológico de los perros, como lo son los fuegos artificiales y petardos. En algunos animales produce reacciones de miedo, en otros en cambio pueden llegar a producir respuestas más severas e intensas, como lo son las fobias.
El miedo es una respuesta natural que permite evitar situaciones peligrosas o aversivas. Dentro de las manifestaciones clínicas se pueden mencionar el aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria, respuesta de lucha (agredir) o bien de huída (escapar), e incluso la conducta de congelación (postura estática).
Las fobias, en cambio, se tratan de respuestas de miedo cuya presentación e intensidad no guarda relación con el peligro real del estímulo y es exagerada, presentando sintomatología similar a la respuesta de miedo, pero con una mayor intensidad, así los perros incluso pueden perder el control de esfínteres, manifestar vocalizaciones excesivas, o bien la conducta de escape (pudiendo quedar con serias heridas producto de ésta reacción).
El origen de las fobias puede ser una experiencia desagradable relacionada con el estímulo que la desencadena o bien, la falta de contacto previo con dicho estímulo, y se puede generar desde etapas tempranas de vida del animal.
Es tarea de los responsables de animales de compañía, así como de médicos veterinarios, reconocer estos signos, de manera de poder actuar en su prevención y en su tratamiento. Cobra vital importancia, en patologías de éste tipo, ponernos en el lugar de los animales, y extrapolar las emociones y sensaciones que sentimos las personas cuando por algún motivo sentimos miedo extremo, lo que permite comprender la seriedad del problema y aplicar medidas de contención.
Algunas medidas que se pueden realizar para prevenir estos signos buscan crear un ambiente adecuado y realizar algunos manejos, tales como:
- Actividad física previa al despliegue pirotécnico (un paseo de al menos 45 minutos será muy útil).
- Enriquecimiento físico ambiental: creando una zona segura para el animal, con una manta, caja o casa (a modo de guarida), con puertas y ventanas seguras, que eviten escapes. Preparar el ambiente en la habitación más alejadas de los estímulos ruidosos.
- Enriquecimiento sensorial, utilizando feromona sintética de apaciguamiento canino, realizando masajes y caricias.
- Enriquecimiento social, basado en la contención de los animales, por parte de sus propietarios cundo el animal muestra signos de miedo o de fobia (nunca castigar o ignorar!)
Cabe destacar que el uso de tranquilizantes no sirven de nada en estos casos, al contrario empeoran seriamente el problema.
Ayudemos a nuestros perros a pasarlo bien en las fiestas de fin de año.